La Noche Oscura de la Madre Teresa de
Calcuta
Padre
Jordi Rivero, 1 Septiembre, 2007
Ver también:
Madre Teresa de
Calcuta
Luz desde la Oscuridad: Entrevista con
el postulador, padre Kolodiejchuk:
Parte I
|
Parte II
Gran sorpresa
ha causado la publicación de la correspondencia
de la Madre Teresa de Calcuta con sus
directores espirituales y superiores
(Madre Teresa: ven se mi luz).
Allí ella expone sus dudas y el vacío espiritual
que sintió por muchos años. Algunos comentaristas seculares hasta se preguntan
si su canonización
se verá
afectada.
Creo que dicha
correspondencia afectará la canonización de
la Madre Teresa positivamente porque
demuestra su santidad heróica. De hecho
estas cartas formaron parte de los
documentos estudiados para su beatificación
en el año 2003 y las publica el
procurador de la causa, el padre Brian
Kolodiejchuk MC, director del Mother Teresa
Center. El ha publicado porque han pasado 10 años del
fallecimiento de la Madre y ha dicho que
muchas personas se identificarán y
beneficiarán de estas cartas. "La Madre
Teresa siempre dijo que la mayor pobreza
está en no ser amado, no ser querido, no ser
cuidado -dijo el Padre Brian- Ella era
solidaria con las personas que vivían todo
eso porque ella misma lo vivía. La Madre
Teresa vivió no solo la pobreza material
sino también la pobreza espiritual" (Our
Sunday Visitor, 2,IX,07). En 1961 en
una carta a las Misioneras de la Caridad,
ella escribió, "Sin sufrimiento nuestro
trabajo sería solo trabajo social...
Toda la desolación de los pobres debe ser
redimida y nosotros debemos compartir en
ella".
La noche
oscura encuentra sólido fundamento en las
Sagradas Escrituras. Jesús nos dice
"Esforzaos por entrar por la puerta
estrecha">>>
(Ver también I Pedro 4:13).
Muchísimos santos han contado sobre sus propias
experiencias similares a las de la
Madre Teresa. Entre ellos
San Benito,
San
Ignacio de Loyola,
Santa Teresa de Avila,
San Juan María
Vianney y San
Vicente de Paul.
Santa
Teresita del Niño Jesús, como la Madre
Teresa, tuvo una noche oscura tan intensa
que era tentada con dudas sobre la
existencia de Dios. Sin embargo ambas
permanecieron fieles aun en la mayor
desolación interior.
San Juan de la
Cruz llamó a la
experiencia "noche oscura del alma". Durante
la noche oscura la persona participa de la experiencia de abandono de
Dios que sufrió el propio Jesús en su pasión
(Cf. Mateo 27:46). Dios
purifica la fe de todo apego a los sentidos,
haciéndola mucho mas fuerte y profunda. En
realidad Dios está presente aunque no se
sienta. San
Pablo de la Cruz y
Santa Juana de
Chantal sufrieron mas de 40 años de
noche oscura.
San Columbano,
siglo VI, escribe:
"Que no falten en mí esas heridas, Señor.
Dichosa el alma que está así herida de amor. Ésa va en busca
de la fuente. Ésa va a beber. Y, por más que bebe, siempre
tiene sed. Siempre sorbe con ansia, porque siempre bebe con
sed. Y, así, siempre va buscando con amor, porque halla la
salud en las mismas heridas. Que se digne dejar impresas en
lo más íntimo de nuestras almas esas saludables heridas el
compasivo y bienhechor médico de nuestras almas, nuestro
Dios y Señor Jesucristo, que es uno con el Padre y el
Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén."
Muchos de los
santos que he mencionado eran bien conocidos
y amados por la Madre Teresa de Calcuta. La
Madre Teresa sabía que para el cristiano lo
importante no es evitarse sufrimientos sino
amar cueste lo que cueste. Ella logró
vivir lo que enseñaba:
"Hagamos algo bello para el Señor".
Su noche oscura no se puede separar del contexto de toda su
vida y enseñanza. Ver
Madre Teresa de
Calcuta
¿Como es
posible que
La Madre Teresa tuviese dudas, períodos de
depresión y desolación espiritual?.
Chuck Colson tiene una buena respuesta:
"Cuando tu luchas con el demonio envuelto en
miseria humana, puedes tener una buena razón
para deprimirte. Lo se por los años que he
trabajado en las cárceles. Hay muchas veces
que te preguntas "¿Donde está Dios?". Estar
deprimido en esas situaciones demuestra que
eres humano. Ser capaz de seguir adelante a
pesar de todo demuestra la presencia de la
mano de Dios.>>
La
experiencia de la Madre Teresa es
incomprensible para los que fundamentan sus
vidas en sus sentimientos y estado de ánimo. Si los
sentimientos le faltan al hombre moderno se
siente perdido. Por eso hay tantos fracasos
en los matrimonios. Dicen "Ya no siento lo
mismo por ella". En cambio, la fe cristiana
se fundamenta en Cristo, la verdad suprema
que se vive según una alianza de amor con
compromisos concretos. A veces los sentidos
ayudan, otras veces no. Hay tiempos buenos y
malos; salud y enfermedad. El cristiano es
como un piloto que se entrena a navegar para
no depender de sus sentidos, porque sabe que
habrá veces en que tendrá que volar en
medio de la tormenta, sin ver nada. La Madre
Teresa de Calcuta será en adelante un gran
consuelo para tantos que navegan en la
oscuridad y desean mantenerse fieles al
Señor. Ella fue admirablemente
consecuente a la verdad y el amor, aunque en su alma sintiese
desolación.
Quizás la
Madre Teresa no se diera cuenta del alto
grado de santidad a que llegó en este mundo.
Dios la protegió por su humildad y
posiblemente gran parte de esa protección
fue por medio de la misma noche oscura que
tanto la hizo sufrir.
El ateo
Christopher Hitchens opina que las cartas de
la Madre Teresa demuestran que ella se dio
cuenta de que "la religión es una
fabricación humana''. El Sr. Hitchens ignora
que la naturaleza del sufrimiento de la
Madre Teresa es de anhelo por el amado. Ella
sentía profundamente la ausencia de Dios
precisamente porque creía en El y lo deseaba.
Lo deseaba porque lo había conocido. Actuó según
esa fe mucho mas allá de cualquier sentir o
no sentir. El ateo no anhela en su alma a
Dios ni sufre por su ausencia. El día que lo
haga dejaría de ser ateo.
Padre Jordi
Rivero