Aportada por
Nancy Durand de Colmenares
1° Día
- Amadísimo Padre San Pío de Pietrelcina, tú que has llevado
sobre tu cuerpo los estigmas de Nuestro Dios Jesucristo. Tú que
también has llevado la Cruz por todos nosotros, soportando los
sufrimientos físicos y morales que te flagelaron continuamente el alma
y el cuerpo, en un doloroso martirio. Te rogamos, intercedas ante Dios
Todopoderoso para que cada uno de nosotros sepa aceptar las pequeñas y
grandes Cruces de la vida, transformando cada individual sufrimiento
en un seguro vínculo que nos ata a la Vida Eterna.
Palabras del Padre Pió:
"Conviene acostumbrarse a los sufrimientos que Jesús os manda. Jesús
que no puede soportar veros sufrir, vendrá a solicitaros y a
confortaros, infundiendo nuevo ánimo en vuestro espíritu"
2° Día
– Santísimo Padre San Pió de Pietrelcina, tú que te encuentras
cerca de nuestro amadísimo Padre Dios Jesucristo, y has tenido la
santidad y resistencia en las tentaciones del maligno. Tú que has sido
golpeado por los demonios del infierno que quisieron convencerte a
abandonar tu camino de santidad. Ruega a Dios por nosotros, para que
con tu ayuda y con la de Nuestro Señor, encontremos la fortaleza
espiritual para renunciar al pecado y para conservar la fe hasta el
día de nuestra muerte.
Palabras del Padre Pío:
"Ánimo y no temas la ira de Lucifer. Recordad siempre: que es una buen
señal cuando el enemigo se agita y ruge alrededor vuestro, ya que esto
demuestra que él no está dentro de ti".
3° Día
–Virtuosísimo Padre San Pío de Pietrelcina, tú que has querido
muchísimo a Nuestra Señora; y que cada día te concedió gracias y
consuelos solamente por ELLA alcanzables. A la Virgen Santa, te
suplicamos ruegues y pongas en Sus manos nuestros pecados y nuestras
frías oraciones, para que como en Caná de Galilea, el Hijo le conceda
a la Madre; y ya nuestro nombre será escrito en el Libro de la Vida.
Palabras del Padre Pío:
"María sea la estrella que os alumbre el camino, os enseñe la calle
segura para ir al Padre Celestial; Ella sea el asidero firme que
tengáis, para que os conservéis cada vez más unidos estrechamente en
el tiempo de la prueba ".
4° Día –Castísimo Padre San Pío de Pietrelcina; que tanto amastes y
nos enseñasteis a amar al Santo Ángel de la Guarda; el que te sirvió de
compañía, de guía, de defensor y de mensajero. A ti las Figuras
Angélicas llevaron los ruegos de tus hijos espirituales. Intercede
cerca de Dios para que también nosotros aprendamos a hablar con
nuestro Ángel de la Guarda, para que en todo momento sepamos
obedecerle, pues es la luz viva de Dios que nos evita la desgracia de
caer en pecado. Nuestro Ángel siempre está listo a señalarnos el
camino del bien y a disuadirnos de hacer el mal.
Palabras del Padre Pío:
"Invoca a tu Ángel de la Guarda, que te iluminará y te conducirá. Dios
te lo ha dado por este motivo. Por tanto válete de él".
5° Día
–Prudentísimo Padre San Pío de Pietrelcina. Tú que tanto amas y
nos enseñasteis a amar a las Almas del Purgatorio; por las que te has
ofrecido como víctima que expió sus penas. Ruega a Dios Nuestro Señor,
para que ponga en nuestros corazones sentimientos de compasión y amor
por estas almas. También nosotros ayudaremos a las Almas del
Purgatorio y reduciremos sus tiempos de destierro y de gran aflicción.
Ganaremos para Ellas, con sacrificios y oración, el descanso eterno de
sus almas; y las santas Indulgencias necesarias para sacarlas del
lugar del sufrimiento.
Palabras del Padre Pío:
"Oh Señor, Padre Jesucristo; te suplico viertas sobre mí, todos los
castigos que son para los pecadores y las ánimas benditas del
purgatorio; multiplica sobre mí los sufrimientos, con
que conviertes y
salvas a los pecadores, y líbralos pronto del tormento del purgatorio
".
6° Día
–Obedientísimo Padre San Pío de Pietrelcina. Tú, que has
querido tanto a los enfermos; más que a ti mismo porque en ellos
vistes a Jesús. Tú, que en el nombre de Dios has obrado Milagros de
sanación en el cuerpo, en el alma, y en la mente, en el presente, en
el pasado y en el futuro de las personas; devolviendo esperanza de
vida y renovación del espíritu, y en la integridad total de las
personas. Ruega a Dios para que todos los enfermos; por intercesión de
Maria Santísima, puedan experimentar tu potente ayuda y a través de la
sanación de su cuerpo encontrar beneficios espirituales y agradecer
para siempre a Dios.
Palabras del Padre Pió:
"Si yo sé que una persona está afligida, sea en el alma o en el
cuerpo, suplicaría a Dios para verla libre de sus males. De buena gana
yo tomaría todos sus sufrimientos para verla salvada y cedería los
frutos de tales sufrimientos en su favor".
7° Día
– Benditísimo Padre San Pío de Pietrelcina. Tú que has
realizado el proyecto de salvación de Dios y has ofrecido tus
sufrimientos para desatar a los pecadores de las riendas de Satanás.
Ruega a Dios para que los hombres, que no creen, tengan una gran y
verdadera fe y se conviertan; arrepintiéndose en lo profundo de su
corazón; y que las personas con poca fe mejoren su vida cristiana; y
que los hombres justos continúen sobre el camino de la salvación.
Palabras del Padre Pío:
"Si el pobre mundo pudiera ver la belleza del alma sin pecado, todos
los pecadores, todos los incrédulos se convertirían al instante. "
8° Día – Purísimo Padre San Pío de Pietrelcina, Tú que has querido
mucho a tus hijos espirituales. Muchos de tus hijos han sido comprados
por ti con el precio de tu sangre. También nos concedes a los que no
te hemos conocido personalmente, de considerarnos como tus hijos
espirituales. Con tu paternal protección, con tu santa guía y con la
fortaleza que conseguirás para nosotros de Dios, podremos, en el
momento de la muerte, encontrarte en las puertas del Paraíso, en
espera de nuestra llegada.
Palabras del Padre Pío: "Si me fuera posible, querría conseguir de Dios solamente una cosa; si
me dijera:
"Vas al Paraíso", querría conseguir esta gracia: "Señor, no me dejéis
ir al Paraíso hasta que el ultimo de mis hijos; la última de las
personas que me han sido confiadas, haya entrado antes que Yo."
9° Día –Humildísimo Padre San Pío de Pietrelcina, Tú que has
verdaderamente amado a la Santa Madre Iglesia. Ruega a Dios, nuestro
Señor, al Señor de la Mies para que mande obreros a Su Mies, y regalos
a cada uno de ellos; de manera que llenando el mundo de sacerdotes
santos; obtengan la fuerza y la inspiración de Dios. Además te rogamos
interceder ante la Santísima Siempre Virgen María; para que conduzcas
a todos los hombres hacia la unidad de los cristianos, reuniéndolos en
la gran casa de Dios; para que la Iglesia sea el faro de luz y
salvación en el mar de tempestad que es la vida.
Palabras del Padre Pío:
"Siempre mantente unido a la Santa Iglesia Católica, porque sólo ella
puede salvarte, porque sólo ella posee a Jesús Sacramentado, que es el
verdadero príncipe de la paz. Fuera de la Iglesia Católica, no hay
salvación, ella te da el bautismo, el perdón de los pecados, el
Cuerpo, la sangre, el Alma, y la Divinidad de Jesucristo,
concediéndote por tanto la vida eterna; y todos los santos sacramentos
para llevar una vida de santidad."