Benedicto XVI: Fiel a la
ortodoxia y renovador.
Padre Jordi Rivero, 29 Abril, 2005.
Se han escuchado muchas opiniones sobre
como debía ser el nuevo Papa: joven, popular, del tercer mundo.
Pero los
designios de Dios no son los nuestros. Nosotros sus hijos debemos
aprender a callar y ejercer la humildad y la prudencia. Mejor es callar
que hablar sin
fundamentos. Solo así le permitimos a Dios enseñarnos lo que es
realmente importante. Pasar de la autosuficiencia a la dependencia en
Dios es entrar la verdad que nos hace libres.
Algunos esperaban un papa que permitiera
los anticonceptivos, el aborto y las uniones homosexuales. Es decir, un
papa que
pusiera fin a
las exigencias de la moral, un Papa "liberal". Estos no entienden
que la doctrina de la Iglesia no es fruto de opiniones. Quien tiene fe cree en la revelación divina.
Dios ha hablado a su pueblo. Entonces, en vez de opinar lo que nos parezca,
hemos de guardar los misterios revelados en el
corazón para meditarlos como hizo María. La teología no es un compendio
de opiniones
humanas sino el estudio de la revelación. En la Iglesia reconocemos una autoridad suprema: Jesucristo,
Nuestro Señor. El es El Camino, la Verdad y la Vida. Hay diversidad de carismas pero una sola
fe. En vez de "Conservador" y "liberal", sería mas
correcto entonces hablar de fidelidad a Jesucristo. Somos fieles o no lo
somos. El Papa, como su
vicario, es el primero que debe ser fiel para poder entonces apacentar a
la ovejas. El tampoco puede cambiar la verdad.
Benedicto XVI es un humilde servidor, un hombre
sabio que sabe escuchar y dialogar. Pero
es también un valiente defensor de la integridad de la
doctrina Católica porque la justicia y el amor exigen que la verdad sea
protegida de toda distorsión. Solo así puede brillar ante los hombres.
El papa comprende
que Jesús es el mismo ayer, hoy y siempre. No vino a destruir sino a dar
cumplimiento y a liberar del pecado que es rebelión contra
la verdad. Nuestro Papa permitirá al Espíritu
moverse libremente en la Iglesia. Los colaboradores cercanos a Benedicto XVI concuerdan en que es un hombre excepcional. El cardenal Gantín
dijo: «Es un hombre de cultura superior. Pero, sobre todo, un hombre de
gran fe y de gran piedad. Es un hombre de oración. Es un hombre que se
nutre del Concilio Vaticano II y es un hombre que conoce la tradición,
que conoce los padres de la Iglesia».
Los cardenales en el cónclave demostraron una fe madura
y valiente al no dejarse presionar por las exigencias de diversos
grupos. Habían aprendido la lección de Juan Pablo II: "No
tengan miedo". Al elegir el nuevo papa en menos de 24 horas,
demostraron que existe una extraordinaria unidad en la alta jerarquía.
Sus prioridades fueron escoger un Papa conocido por su santidad,
ortodoxia y competencia para la enorme misión de ser
Vicario de Cristo.
Conservador o Liberal
Hay doctrinas que pueden desarrollarse, pero la verdad no cambia. El Papa y todos los católicos debemos ser
"conservadores" si por ello entendemos que conservamos la doctrina
revelada por Cristo. Pero debemos ser "liberales" en cuanto que creemos en los
movimientos del Espíritu en la actualidad y que por lo tanto debemos
cuestionar la historia y el presente para descubrir los verdaderos
signos de los tiempos a la luz de la fe. La clave está en nuestra total
obediencia a Cristo que nos guía a través de la Iglesia. El es el
verdadero punto de referencia para todo. Conservamos lo que es de El y
buscamos que su luz transforme lo que no es de El.
La Persecución
Benedicto XVI sabe que el pontificado es una gran cruz. Jesús preparó a sus discípulos para ser
perseguidos. -«¡Jerusalén,
Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que le son
enviados! -Mateo 23,37
-os entregarán a los tribunales y os
azotarán en sus sinagogas. Mateo 10,17
-Bienaventurados seréis cuando los hombres os odien, cuando os expulsen,
os injurien y proscriban vuestro nombre como malo, por causa del Hijo
del hombre. Lucas 6,22
-"Porque si en el leño verde hacen
esto, en el seco ¿qué se hará?» Lucas 23,31
Quienes tratan de crear una imagen de
Benedicto XVI como "intransigente" y "cerrado" no tendrán éxito. Lo
mismo trataron de hacer con Juan Pablo II pero no pudieron porque estos
grandes hombres se definen ellos mismos por la autenticidad de sus
palabras y obras. Llenos del Espíritu Santo, son capaces de tocar los corazones con la elocuencia
de la verdad. Por eso tantos jóvenes se hicieron presentes en los
funerales del Juan Pablo II y también en la instalación de Benedicto
XVI.
Un Papa renovador
Benedicto XVI, siguiendo su trayectoria
de brillante teólogo y buen pastor, fiel al Señor, sin miedos ni complejos, no será un
Papa de "transición". Su teología ayudó a impulsar las
reformas del Concilio Vaticano II y a preservar de falsas
interpretaciones del mismo. Ahora como Papa ya ha manifestado su
intención de continuar en la verdadera reforma promulgada por el
Concilio.
No nos dejemos influenciar por
aquellos que resienten que el Papa continúe siendo fiel a la fe
católica. Vayamos a las fuente y conozcamos bien a nuestro
Papa. Estudiemos con apertura de mente y corazón lo que nos
enseña. Demos gracias a Dios por Benedicto XVI y
seamos fieles al pastor que representa fielmente a
Cristo. Que la
Virgen lo proteja y guíe por muchos años.