Santos y teología del corazón - Dichos de Santos |
DICHOS DE SANTOS Editados por SCTJM A "Tu vida puede ser la única Biblia que muchos lean." Anónimo "Perdonar no es olvidar, es recordar sin dolor, sin amargura, sin la herida abierta; perdonar es recordar sin andar cargando eso, sin respirar por la herida, entonces te darás cuenta que has perdonado." Anónimo "La falta de voluntad ha causado más fracasos que la falta de inteligencia o habilidad." Anónimo
San Agustín "Dios no manda cosas imposibles, sino que, al mandar, te enseña a que hagas cuanto puedes, y a que pidas lo que no puedes". "No entones las alabanzas divinas solo con la voz, acompaña también la voz con las obras. Si cantas solo con la voz, por fuerza tendrás al fin que callar; canta con la vida para no callar jamás." "La soberbia no es grandeza, sino hinchazón; y lo que está hinchado parece grande, pero no está sano." "Abraza al Dios Amor y abraza al Dios del amor." "Cuando se ama no se sufre y si se sufre hasta se ama el mismo sufrimiento". "Soy el alimento de los fuertes alimentaos de Mi; no seré yo quien me cambie en ti, sino tú quien se cambiará Mí." "No morirá de mala muerte el que oye devotamente y con perseverancia la Santa Misa". "Señor, tú alegras mi mente de alegría espiritual. Cómo es glorioso tu cáliz que supera todos los placeres probados anteriormente." "Tú que eres fervoroso en el espíritu, estás inflamado por el fuego del amor. Haz que tu vida se queme en la oración a Dios. Una persona esta caliente, la otra está fría. Haz que la caliente dé calor a la fría." "Hermanos y hermanas, tened firmemente fe en lo que creéis: que Cristo volverá. ¿Que importa cuando? Preparaos para su venida. Vivid como si viniera hoy y no tendréis miedo de su venida". "Nos has creado para Ti, y nuestro corazón no descansará hasta que descanse en Ti". "Todo esta contenido en estas palabras, "Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas: y ama a tu prójimo como a ti mismo". "Yo no viviré un instante en cual no viva en el amor".
San Alfonso María de Ligorio "El Eterno se enamoró de vuestra incomparable hermosura, con tanta fuerza, que se hizo como desprenderse del seno del Padre y escoger esas virginales entrañas para hacerse Hijo vuestro. ¿Y yo, gusanillo de la tierra, no he de amaros? Sí, dulcísima Madre mía, quiero arder en vuestro amor y propongo exhortar a otros a que os amen también"
San Antonio de Padua "Un cristiano fiel, iluminado por los rayos de la gracia al igual que un cristal, deberá iluminar a los demás con sus palabras y acciones, con la luz del buen ejemplo". B San Bernardo "Debemos amar a Dios porque Él es Dios, y la medida de nuestro amor debe ser amarlo sin medida." "Al conocer lo que Dios nos ha dado, encontraremos muchísimas cosas por las que dar gracias continuamente". San Bernardo ...sobre la necesidad de acudir a la Stma. Virgen: -Si se levanta la tempestad de las tentaciones, si caes en el escollo de las tristezas, eleva tus ojos a la Estrella del Mar: invoca a María!. Si te golpean las olas de la soberbia, de la maledicencia, de la envidia, mira a la estella, invoca a María! Si la cólera, la avaricia, la sensualidad de tus sentidos quieren hundir la barca de tu espíritu, que tus ojos vayan a esa estrella: invoca a María! Si ante el recuerdo desconsolador de tus muchos pecados y de la severidad de Dios, te sientes ir hacia el abismo del desaliento o de la desesperación, lánzale una mirada a la estrella, e invoca a la Madre de Dios. En medio de tus peligros, de tus angustia, de tus dudas, piensa en María, invoca a María! El pensar en Ella y el invocarla, sean dos cosas que no se parten nunca ni de tu corazón ni de tus labios. Y para estar más seguro de su protección no te olvides de imitar sus ejemplos. Siguiéndola no te pierdes en el camino! ¡Implorándola no te desesperarás! ¡Pensando en Ella no te descarriarás! Si Ella te tiene de la mano no te puedes hundir. Bajo su manto nada hay que temer. ¡Bajo su guía no habrá cansancio, y con su favor llegarás felizmente al Puerto de la Patria Celestial! Amén!!
Santa Brígida "Has de saber, hija mía, que mis caudales y tesoros están cercados de espinas, basta determinarse a soportar las primeras punzadas, para que todo se trueque en dulzuras." C Santa Catalina de Siena "La verdadera perfección consiste en esto: hacer siempre la santísima voluntad de Dios." "El mérito consiste sólo en la virtud de la caridad, sazonado con la luz de la verdadera discreción".
Santa Clara "¡Oh pobreza bienaventurada que da riquezas eternas a quienes la aman y abrazan!" "¡Oh pobreza santa, por la cual, a quienes la poseen y desean, Dios les promete el Reino de los Cielos y la vida bienaventurada!" "¡Oh piadosa pobreza a la que se digno abrazar con predilección el Señor Jesucristo, el que gobernaba y gobierna cielo y tierra y, lo que es más, lo dijo y todo fue hecho!" "En la medida en que se ama algo temporal, se pierde el fruto de la caridad." "Ten cautela, hermana mía muy amada, en no dejarte abatir por la adversidad ni envanecer por la prosperidad." "Él derramará sobre ti sus bendiciones y será tu defensor, tu consolador, tu redentor y tu recompensa en la eternidad." "Es propio de la fe hacernos humildes en los sucesos felices e impasibles en los reveses."
San Claudio de la Colombiere "A cualquier precio que sea, es necesario que Dios esté contento." "¡Oh Corazones, verdaderamente dignos de poseer todos los corazones, de reinar sobre todos los corazones de los ángeles y de los hombres! Vosotros seréis, de aquí en adelante, la regla de mi conducta, y en todas las ocasiones trataré de inspirarme en vuestros sentimientos. Quiero que mi corazón no esté, en adelante, sino en el de Jesús y el de María, o que el de Jesús y María estén en el mío, para que ellos le comuniquen sus movimientos; y que el mío no se agite ni se mueva, sino conforme a la impresión que de ellos reciba." "Los golpes imprevistos no permiten muchas veces que uno aproveche de ellos, a causa del abatimiento y turbación que levantan en el alma; mas tened un poquito de paciencia, y veréis como Dios os dispone a recibir gracias muy grandes precisamente por aquel medio. Sin tales percances tal vez no habrías sido del todo malos, pero tampoco del todo buenos." ACTO DE CONFIANZA Estoy tan convencido, Dios mío, de que velas sobre todos los que esperan en Ti, y de que no puede faltar cosa alguna a quien aguarda de Ti todas las cosas, que he determinado vivir de ahora en adelante sin ningún cuidado, descargando en Ti todas mis solicitudes. "En paz me duermo y en seguida descanso porque Tú solo, Señor, me has confirmado en la esperanza" (Salmo 4:10). Despójenme en buena hora los hombres de los bienes y de la honra, prívenme de las fuerzas e instrumentos de serviros las enfermedades; pierda yo mismo vuestra gracia pecando, que no por eso perderé la esperanza, antes la conservaré hasta el postrer suspiro de mi vida, y vanos serán los esfuerzos de todos los demonios del infierno por arrancármela. Que otros esperen la dicha de sus riquezas o de sus talentos: que descansen otros en la inocencia de su vida, o en la aspereza de su penitencia, o en la multitud de sus buenas obras, o en el fervor de sus oraciones; en cuanto a mi toda mi confianza se funda en mi misma confianza: Porque Tú solo Señor, me has confirmado en la esperanza'. Confianza semejante jamás salió fallida a nadie: `Nadie esperó en el Señor y quedó confundido' (Sir. 2:11). Así que, seguro estoy de ser eternamente bienaventurado, porque espero firmemente serlo, y porque Tú, Dios mío, de quien lo espero: `en Ti, Señor, he esperado, no quede avergonzado jamás" (Sal 30:2; 70:1). Conocer, demasiado conozco que por mi soy frágil y mudable; sé cuánto pueden las tentaciones contra las virtudes más robustas; he visto caer las estrellas del cielo y las columnas del firmamento; pero nada de eso logra acobardarme. Mientras yo espere, estoy a salvo de toda desgracia; y de que esperaré siempre estoy cierto, porque espero también esta esperanza invariable. En fin, para mí es seguro que nunca será demasiado lo que espere de Ti, y nunca tendré menos de lo que hubiere esperado. Por tanto, espero que me sostendrás firme en los riesgos mas inminentes y me defenderás en medio de los ataques más furiosos, y harás que mi flaqueza triunfe de los más espantosos enemigos. Espero que Tú me amarás a mi siempre, y que te amaré a Ti sin intermisión; y para llegar de un solo vuelo con la esperanza hasta donde puede llegarse, espero a Ti mismo de Ti mismo, oh Creador mío, para el tiempo y la eternidad. Amén F Santa Faustina, Diario # 1685: (Como descansar en el Corazón de Jesús) "Hija mía, observa fielmente las palabras que te voy a decir: no valores demasiado ninguna cosa exterior, aunque te parezca muy preciosa. Olvídate de ti misma y permanece continuamente Conmigo. Confíame todo y no hagas nada por tu cuenta y tendrás siempre una gran libertad de espíritu; ninguna circunstancia ni acontecimiento llegará a perturbarte. No prestes mucha atención a lo que dice la gente, deja que cada uno te juzgue según le guste. No te justifiques eso no te causará daño. Dalo todo a la primera alusión de petición, aunque fueran las cosas mas necesarias; No pidas nada sin consultarme. Deja que te quiten incluso lo que te mereces; la estima, el buen nombre; que tu espíritu esté por encima de todo esto. Y así liberada de todo, descansa junto a Mi Corazón, no permitas que nada turbe tu paz. Discípula analiza las palabras que te he dicho".
San Felipe Neri "Quien quiera algo que no sea Cristo, no sabe lo que quiere; quien pida algo que no sea Cristo, no sabe lo que pide; quien no trabaje por Cristo, no sabe lo que hace" -San Felipe Neri "Como es posible que alguien que cree en Dios pueda amar algo fuera de Él". "¿Oh Señor que eres tan adorable y me has mandado a amarte, por qué me diste tan solo un corazón y este tan pequeño?" San Felipe Neri
San Francisco de Asís Muerte: "Recuerda que cuando abandones esta tierra, no podrás llevar contigo nada de lo que has recibido, solamente lo que has dado: un corazón enriquecido por el servicio honesto, el amor, el sacrificio y el valor." "El amor de Jesucristo me quita el gusto para todo, las criaturas no tienen atractivo alguno para mi, ni los ángeles ni los arcángeles pueden colmar las ansias de mi corazón, los rayos del sol, cuando contemplo el resplandeciente rostro de mi Amado, me parecen densas tinieblas" "Cuando no puedo asistir a la Santa Misa, adoro el Cuerpo de Cristo con los ojos del espíritu en la oración, lo mismo que le adoro cuando le veo en la Misa." "La ley de Cristo, que se cumple en el amor, nos obliga a procurar la salvación de las almas más que la del cuerpo" "La cortesía es hermana de la caridad, que apaga el odio y fomenta el amor." "Mucho os ama el Creador pues os hace tantos beneficios; por eso debéis guardaros del pecado de la ingratitud y cuidar de alabar siempre a Dios" "La cortesía es hermana de la caridad, que apaga el odio y fomenta el amor." "Ninguna otra cosa hemos de hacer sino ser solícitos en seguir la voluntad de Dios y en agradarle en todas las cosas." "Siempre obedientes y sujetos a los pies de la Santa Iglesia, firmes en la fe católica, guardemos la pobreza y la humildad y el Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo." "Así, purificados interiormente, iluminados y encendidos por el ardor del Espíritu Santo, podamos seguir las huellas de tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo." "Cuanto más tentado te veas, sábete que eres más amado. Nadie debe reputarse siervo de Dios hasta tanto que pase por las tentaciones y arideces". "Dios os salve, María, Madre de Dios. En Vos está y estuvo todo la plenitud de la gracia y todo bien." "Te doy gracias ¡Oh Señor y Dios mío! por todos estos dolores... ya que en cumplir tu santísima voluntad encuentro yo los más inefables consuelos". "Amemos a Dios y adorémosle con corazón sencillo y espíritu puro, que eso busca El por encima de todo". "La Cruz que llevaba grabada en su corazón, a fuerza de contemplación, le rompió un día la piel, floreciéndosela en llagas". "Ya no necesito más: conozco a Cristo pobre y crucificado". "Dichoso quien no tiene más gozo y alegría que las palabras y obras del Señor".
San Francisco de Borja "Para poder sufrir más, Cristo no abrió enseguida su costado. Lo abrió después de morir, para revelar el amor de su corazón, para enseñarnos que el amor no se hace espiritualmente presente antes de la muerte del hombre viejo que vive en nosotros según la carne."
San Francisco de Sales "El corazón lleno de amor ama los mandamientos, y cuanto más difíciles son, los encuentra más dulces y agradables, porque complacen más el Amado y le dan más honor." "El grado mas perfecto de humildad es complacerse en los menosprecios y humillaciones. Vale mas delante de Dios un menosprecio sufrido pacientemente por su amor, que mil ayunos y mil disciplinas." "La verdadera y sólida devoción consiste en una voluntad constante, resuelta, pronta y activa de ejecutar lo que se conoce ser del agrado de Dios". "No bajemos los ojos sin humillar el corazón al mismo tiempo; no demos a entender que queremos el último lugar sin quererlo verdaderamente". "La humildad, pues, nos perfecciona en lo que mira a Dios, y la mansedumbre en lo que toca al prójimo". "Sabed que la virtud de la paciencia es la que nos asegura la mayor perfección". "La oración, unida con ese divino sacrificio de la Misa, tiene una fuerza indecible; de modo que por este medio abunda el alma de celestiales favores como apoyada sobre su Amado". "Si vuestro ojo es simple todo vuestro cuerpo lo será". "Los santos sienten que Jesucristo Sacramentado se difunde y comunica totalmente a sus almas y a sus cuerpos. El todo lo repara, modifica y vivifica; ama en el corazón, escucha en la cabeza, ve en los ojos, habla en la lengua; hace todo en todo y entonces no vivimos nosotros, sino que el mismo Jesucristo quien vive en nosotros". "Entre la prácticas de la religión, el Santísimo Sacrificio es lo que el Sol entre los astros; pues es verdaderamente el alma de la religión cristiana. Es el misterio inefable que comprende la caridad divina, por la cual Dios, uniéndose realmente a nosotros, nos comunica con su magnificencia sus gracias y favores". "Hay que hacer todo por amor, no por la fuerza". San Francisco de Sales "Hay que dejar que rodeen nuestro cerebro las espinas de las dificultades, y dejar traspasar nuestro corazón por la lanza de la contradicción; beber la hiel y tragar el vinagre, ya que eso es lo que Dios quiere". "Para ir a Dios hay muchos caminos quizás más excelentes que el que nosotros seguimos; reconozcamos su excelencia, pero pongamos todo nuestro empeño en progresar en el camino en que Dios nos puso, porque allí es donde El nos quiere". "La santidad se encuentra en el camino que nos abre cada uno de nuestros días, en que se ofrecen a nosotros, con atractivo desigual, los deberes de nuestra vida cotidiana". "Es el amor lo que da precio a todas nuestras obras; no es por la grandeza y multiplicidad de nuestras obras por lo que agradamos a Dios, sino por el amor con que las hacemos". "Todo el bien que hagamos, hay que hacerlo por amor a Dios, y el mal que evitemos hay que evitarlo por amor de Dios". "Besad de corazón frecuentemente las cruces que Nuestro Señor mismo pone sobre vuestros hombros; no miréis si son de madera preciosa o perfumada; ellas son más cruz cuanto sean de una madera más vil, abyecta y maloliente". "Lo que nos hace santos y agradables a Dios es lo que nuestra vocación nos exige, y no lo que escoge nuestra propia voluntad". "Debemos hacer todas nuestras acciones por la obligación que tenemos de ellas o por una simple aceptación del beneplácito de Dios, y esto tanto en la calma como en la tempestad". "No solamente hay que aceptar que Dios nos hiera, sino que hay que aceptar que nos hiera donde le plazca; hay que dejar la elección a Dios, porque a El le pertenece". "No hay cosa que purifique más el entendimiento de ignorancias, y la voluntad de afectos depravados que la oración" "El amor es la perfección del espíritu y la caridad es la perfección del amor". "La perfección de la vida es la perfección del amor. Puesto que el amor es la vida del alma." "Algunos se atormentan buscando la manera de amar a Dios. Estas pobres almas no saben que no hay ningún método para amarle fuera de hacer lo que le agrada". "El amor es un movimiento, una efusión y un avance del corazón hacia lo bueno". "No tenemos el amor que necesitamos para amar a Dios como Él se lo merece". "El alma no puede vivir sin amor. Todo depende de proveerle un objeto digno de ser amado". "¿Como es posible tener corazón y no amar una tan infinita bondad?" "¡Oh amor eterno! Mi alma te requiere y te escoge eternamente". "O amar o morir; o morir o amar". "El santo amor establece su morada en la más alta y encumbrada región del espíritu". "La complacencia y el movimiento de la voluntad hacia la cosa amable, es propiamente hablando, el amor". "Quería amar y no conocía lo que había de amar. ¡He encontrado al que buscaba mi alma!" "La complacencia es el despertar del corazón; el amor es la acción". "Una prueba de que amamos a Dios verdaderamente es que lo amamos de igual forma en todas las ocasiones". G Santa Gema Galgani "Jesús, Dueño mío... Cuando mi cabeza se acerque a la tuya, hazme sentir el dolor de las espinas que te punzaron. Cuando mi pecho se recline sobre el tuyo, haz que yo sienta la lanzada que te traspasó".
San Gregorio Magno "Pasó el tiempo de las persecuciones, pero también nuestra paz tiene un martirio propio: no doblamos ya nuestro cuello bajo el hierro, pero con la espada del espíritu nosotros mismos matamos los deseos carnales de nuestra alma". "La prueba del amor está en las obras. Donde el amor existe se obran grandes cosas y cuando deja de obrar deja de existir". H I San Ignacio de Antioquia "Los que hacen profesión de pertenecer a Cristo se distinguen por sus obras" "Obrando según lo que hablan y dándose a conocer por lo que hacen sin hablar"
San Ignacio de Loyola "Señor, si tan maravillosas son las pálidas imágenes tuyas, ¡que insondable y admirable será tu misma grandiosidad!". "Podemos sufrir que nos hagan ventaja en otras cosas, pero no en la obediencia". "Enséñanos, buen Señor, a servirte como mereces: a dar sin contar el costo, a luchar sin contar las heridas, a trabajar y a no buscar descanso, a laborar sin pedir recompensa excepto saber que hacemos tu voluntad".
San Ireneo "El nudo de la desobediencia de Eva fue desatado por la obediencia de María; lo que ato la virgen Eva por la incredulidad, la virgen María lo desato por la fe" J San Juan Bosco
San Juan Crisóstomo "Cuando el amor de Dios obtiene la voluntad del alma produce en ella un insaciable deseo de trabajar por el Amado".
San Juan de la Cruz "El alma que esta enamorada de Dios es una alma gentil, humilde y paciente". "El Señor se le apareció a San Juan, con la cruz a cuestas y le dijo: "Juan, pídeme lo que quieras", Y el Santo respondió: " Padecer, Señor, y ser por Vos despreciado". "El amor no consiste en grandes cosas, sino en tener grande desnudez y padecer por el Amado" "En el ocaso de nuestras vidas seremos juzgado en el amor". "No pienses que el agradar a Dios esta tanto en obrar mucho como en obrarlo con buena voluntad, sin propiedad y respetos". "EL cielo es firme y no está sujeto a generación, y las almas que son de naturaleza celestial son firmes, no están sujetas a engendrar apetitos ni otra cualquier cosa, por que se parecen a Dios en su manera, que no se mueve para siempre". "El árbol húmedo invadido por el fuego: primero humo, luego crepita; después llama; finalmente brasa".
Santa Juana de Chantal "Oh Dios mío! Hermanas mías, ¿en qué otra cosa debemos complacernos sino en hablar de Dios, de la eternidad, de la dicha de nuestra vocación, del amor y fidelidad que debemos de tener para adquirir con perfección el espíritu de nuestro Instituto y orara consérvale cuidadosamente?" L San Luis Maria Griñón de Monfort "Antes de la Comunión... suplica a esta bondadosa Madre que te preste su corazón para recibir en él a su Hijo con sus propias disposiciones." "En efecto, toda la perfección cristiana consiste: 1. En querer ser santo: "El que quiera venirse conmigo" 2. En abnegarse: "que reniegue de sí mismo" 3. En padecer: "que cargue con su cruz" 4. En obrar: "y me siga" (Amigos de la Cruz) M Santa Margarita Maria "A pesar de toda oposición, este Divino Corazón eventualmente triunfará. Dichosos los que han sido instrumentos para establecer su Reinado". "Acepta lo que te manda el Sagrado Corazón de Jesucristo para unirte a si." "Este divino Corazón es pero dulzura, humildad y paciencia, por lo tanto, debemos esperar... El sabe cuando actuar." "Recuerda que la perfección consiste en conformar la vida y las acciones totalmente a las virtudes sagradas del Corazón de Jesús, especialmente su paciencia, su mansedumbre, su humildad y su caridad. Como resultado, nuestra vida interior y exterior llega a ser una imagen viva de El". "Solo el corazón humilde puede entrar en el Sagrado Corazón de Jesús, conversar con Él, amarle y ser amado de Él". "El Sagrado Corazón de nuestro Soberano Dueño es una fuente inagotable que anhela derramarse en los corazones humildes, vacíos y desprendidos de todo, y prontos a sacrificarse a su servicio por mucho que cueste a la naturaleza". "Al Corazón de Jesús le agradan mucho los servicios de los pequeños y humildes de corazón, y paga con bendiciones sus trabajos". "Halla purísimo placer en las almas anonadadas que son totalmente suyas y todo lo poseen en Él, cuando están desposeídas de si propias". "En sobreviniendo la humillación, regocijáos, porque entraréis muy adentro en el Corazón de Jesús". "Abrazaos humildemente con las cosas que más os humillen y anonaden, como medios muy al caso para hacer que triunfe el dulce y amable Corazón de Jesús, y reine el vuestro en el suyo." "Juzgo que os hace especial merced en daros a conocer y haciendo que améis vuestra abyección; porque no hay medio más eficaz que ése para penetrar y permanecer en la amistad del Sagrado Corazón de Jesús." "Es un cordial a propósito para dar la vida de la gracia a vuestra alma, y la del puro amor a vuestro corazón y a todas las buenas acciones. En fin, la virtud del Sagrado Corazón de Jesús abate hasta nosotros su grandeza, si nos halla anonadados en el amor de nuestra pequeñez, y cuidará de levantaros a su unión al paso de todo aquello que resplandece a los ojos de las criaturas. Con esto todo está dicho". "¡Dios mío! ¡Que tesoro tan inmenso es el amor a la pequeñez y a nuestra propia abyección! ¡Qué no debiéramos hacer y padecer por alcanzarlo! El alma que tanto bien posee, esta segura y nada puede faltarle, porque el Todopoderoso en ella se complace y recrea". "Mirad, pues, este camino humilde como el verdadero, trazado por Él, y el más indefectible para llegar a Él. ¿Qué teméis en un sendero tan seguro como el de las humillaciones, en donde la mejor de todas nos viene sin repararlo siquiera? Porque la humildades de tal naturaleza, que desaparece en el punto mismo que la echamos de ver en nosotros." "Solo en el total desasimiento de vos mismo y de todo lo que no es Dios hallaréis la verdadera paz y dicha perfecta, porque no teniendo nada, lo hallaréis todo en el sagrado Corazón de Jesús." "Sed pobre de todo, y el Corazón de Jesús os enriquecerá." "Vaciaos de todo, y Él os henchirá." "Olvidáos de vos mismo y entregáos a Él, y Él tendrá cuenta y cuidado de vos." "No puedo deciros más sino que el anonadamiento de vos mismo os elevará a la unión del Soberano Bien. Olvidándoos, lo poseeréis, y abandonándoos a Él, Él os poseerá." "Y ¿que mayor bien que no ser nada para el mundo ni para nosotros mismos, por ser poseídos de Dios y poseerle a "El solo?" "Mi divino maestro, dice, me era asiduo compañero en los oficios que tenía que hacer a todas horas. En este tiempo recibí gracias tan extraordinarias, sobre todo en el misterio de la Pasión, que nunca las había sentido iguales; y esto causó en mí un tan grande amor a la Cruz, que no puedo vivir un instante sin padecer, pero en silencio, sin consuelo ni alivio, y morir con este Soberano de mi alma, abrumada por la cruz de toda clase de padecimientos; esto ha durado toda mi vida, la cual por su misericordia se ha pasado toda en este linaje de ejercicios, que son los del puro amor". "Guardad siempre vuestro interior en silencio, hablando poco con las criaturas y mucho con Dios, padeciendo y trabajando por su amor". "Tened los sentidos interiores y exteriores en el Sagrado Corazón de nuestro Señor, imponiéndoles un profundo silencio: silencio interior, cercenando pensamientos inútiles y sutilezas del amor propio, para disponernos a oír al voz del esposo; silencio en todo lo que pueda seros a voz materia de alabanza y excusa, de censura y acusación a los otros; silencio en los ímpetus con que la naturaleza inmortificada pretenda mostrar alegría o descontento en cosas tristes..., y este silencio será para honrar el de Jesús solitario en el Santísimo Sacramento. Por este medio aprenderéis a conversar con su Sagrado Corazón y a amarle en silencio". "La afición a nuestro menosprecio en el Corazón de Jesús, nos basta para honrar los misterios de su santa muerte y pasión; y Cristo desea que le honremos guardando este sagrado silencio, como Él, en todas las ocasiones de humillación y trabajo; porque os confieso que no hay cosa que tanto me contente, como la taciturnidad que guardó tan exactamente en el discurso de la pasión, A imitación suya, no abramos la boca sino para orar por los que nos afligen y maltratan". "Habéis de mostraros mansos en llevar con paciencia los desabrimientos, genialidades y molestias del prójimo, sin desazonarnos por las contrariedades que os ocasionen; al contrario, hacedle de buen grado los servicios que podáis, porque éste es el modo de granjear la amistad y gracia del Sagrado Corazón de Jesús". "Buscar ocasión de contentarle con el ejercicio de la santa caridad, sintiendo y hablando bien de vuestros prójimos, asistiendo a los pobres cuando podáis, espiritual o corporalmente, mirando a Jesucristo en persona de ellos, y no haciéndoles cosa que no quisiéramos que con nosotros se hiciese". "Tened con todos paciencia, para merecer que todos en particular los pobres, acudan a vosotros en sus necesidades. Tened a todo el mundo por amigo y a nadie por enemigo, en cuanto según Dios sea posible". "Yo te amo corazón amabilísimo, como a mi soberano Bien, mi dicha, mi alegría y el único digno del amor de todos los corazones". "Cuando te levantes, entra en el Sagrado Corazón de Jesús y conságrale tu cuerpo, tu alma, tu corazón y tu ser por completo, para solamente vivir por su amor y gloria". "Puedo ver, tan claro como el día, que una vida que no tiene el amor de Jesucristo vive la mas grande miseria". "Aplíquense ha amar y sufrir amando. Cuando adquirimos la perfecta sabiduría, entonces haremos todo lo que Dios desea de nosotros". "Cuando uno ama, todo habla de amor, hasta nuestros trabajos que requieren nuestra total atención pueden ser un testimonio de nuestro amor". "Debemos amar al Santo de los Santos, para hacernos santos: quien nos puede impedir esto, si tenemos un corazón para amar y un corazón para sufrir". "Muere o conquista... No puede haber ninguna reserva en el amor". "Has todo por amor y para el amor, haciendo buen uso del tiempo presente, y no estés ansioso sobre el futuro". "Para hacer buen uso del tiempo ama ardientemente y constantemente; debemos entregarnos totalmente al amor, dejando que actúe por nosotros". "Nuestro corazón es tan pequeño, que no caben en él dos amores; y habiendo sido creado sólo para el divino, no puede tener descanso cuando se halla con otro". "Que tu lema sea: El Amor me ha conquistado, solo El puede poseer mi corazón". "Ámalo con todas tus fuerzas, piensa siempre en Él, deja que Él haga contigo y para ti todo lo que Él deseé, no ansíes nada mas". "Que el Sagrado Corazón logre en ti todos sus designios y que Él sea tu fortaleza, para que tu puedas con valentía cargar el peso de tus responsabilidades". "Amor, gloria y alabanzas sean dadas por siempre al Corazón de nuestro adorable Salvador, que es todo amor, todo amoroso y todo amable". "Yo clamo al Sagrado Corazón de mi amadísimo Jesús, que es mi único tesoro, que te regale de la abundancia de su puro amor". "Las mas amargas tristezas son dulzuras en su adorable Corazón, donde todo se cambia al amor". "Hemos de procurar en lo posible penetrar dentro de este Corazón adorable, haciéndonos muy pequeños, por la humilde confesión de nuestra nada". "Si obras, sea tan sólo por los impulsos del Corazón de Jesús; muere en silencio delante de El a todo lo que es natural o humano". "¡Oh Corazón divino! A ti me adhiero y en ti me pierdo. Sólo de ti quiero vivir, por ti y para ti". "Hallo en el Sagrado Corazón de mi Jesús todo lo que falta a mi pobreza, porque está rebosando de misericordia. No he hallado remedio más eficaz en mis afiliaciones que el Sagrado Corazón de mi adorable Jesús". "Basta que le conozcan; después este Divino Corazón se encargará de llenar con la unción de su gracia los corazones que Él escogió". "Debemos consumirnos y transformarnos, sin otro remedio, en esta ardiente hoguera del Sagrado Corazón de Nuestro adorable Dueño, sin salir de ella jamás". "Si supieras cuán dulce es amar a Dios, ningún trabajo os parecería intolerable en razón de conseguir este amor". "Escondedme, dulce Salvador mío, en el sagrario de vuestro costado y en vuestro adorable Corazón, fragua encendida del puro amor y así estaré seguro". "El adorable Corazón de Jesús debe ser el santificador y consumador de los nuestros con los santos incendios de su puro amor". "Basta amar al Santo de los Santos, para llegar a ser santos" "Nuestro Señor quisiera veros adelantar a pasos largos en la senda de su amor... No regateéis con Él más tiempo, entregádselo todo, y Él hará que lo halléis todo en su Divino Corazón". "Andad despacio, procurando adaptar vuestra vida interior y exterior al modelo de la humilde mansedumbre del Corazón de Jesús". "Puesto que quien ama es todopoderoso amemos y ninguna cosa se nos hará cuesta arriba". "El sagrado Corazón de Jesús sabe bien lo que pasa en el vuestro, y por esto permite vuestras penas. Guardad paz y someteos a las disposiciones que tome sobre vuestras almas. Al fin hallaréis la victoria y la paz en el Sagrado Corazón". "¿Qué tenéis vosotros que temer, si este Sagrado Corazón os rodea con su poder, como con un muro inexpugnable a los asaltos del enemigo?" "¡Señor, mi corazón es vuestro! No permitáis le ocupe cosa sino Vos que sois el galardón de mis victorias y el apoyo de mi debilidad". "Como el amor hace uno a los amantes, si queréis ser amado de Jesús habéis de ser manso como Él, y humilde como Él". "¡Cuan obligados estáis al Sagrado Corazón de nuestro buen Maestro, que tanto os ama! Amadle a Él en retorno con todo el amor de que sois capaces y tributadle toda bendición y toda gloria". "Este Divino Corazón os hará que experimentéis los efectos de su generosa mano, si confiáis plenamente en su amorosa bondad". "Vuestro Corazón ha de ser el trono de vuestro Amado, retornándole amor por amor, guardándole aquella lealtad que más le guste, según Él os dé a conocer. Entregamiento total por el amor, en el amor, al amor, sin tasa ni restricción". "Amad y haced lo que queréis, porque quien posee el amor todo lo posee". "El amor nada quiere de corazones divididos; lo quiere todo o nada. El amor os lo hará todo fácil". "Vayamos, pues, con filial confianza, y arrojémonos en sus brazos, extendidos por el amor en la cruz para recibirnos. Digámosle a menudo: Dios mío, Vos sois mi Padre; tened compasión de mí, según vuestra misericordia". "¡Ah! Si pudierais entender la gran caridad de Nuestro Señor para con vosotros, veríais claro que sus permisiones y disposiciones son puro amor". "El Corazón de Jesús os pide confianza en su bondad para que experimentéis la dulzura y fuerza de su asistencia en vuestras necesidades, la cual irá siempre al paso de la confianza". "El Sagrado Corazón de Nuestro Señor Jesucristo hará en todo mis veces si le dejo obrar. Querrá, amará, deseará por mí, y suplirá todas mis faltas". "Entra en este Sagrado Corazón como convidado al banquete de amor de tu único y perfecto amigo, que quiere embriagarte con el deleitoso vino de su puro amor". "Jesucristo es el solo y verdadero amigo de nuestros corazones, que han sido creados para Él solo; por esto no pueden hallar contento, descanso ni hartura sino en sólo Él". "Haced las cosas todas en el amor y para el amor, porque el amor da mérito y realce a todas las cosas". Jesús a Santa Margarita Maria "Te daré Mi Corazón, pero primero debes constituirte en Su holocausto". "Reconoce, pues que nada puedes sin Mi; Yo no dejaré nunca de socorrerte, con tal que tengas siempre tu nada y tu debilidad abismadas en mi fortaleza." "Déjame hacer cada cosa a su tiempo, pues quiero que seas ahora el entretenimiento de mi amor, el cual desea divertirse contigo a su placer, como hacen los niños con sus muñecos.. Es menester que te abandones así sin otras miras ni resistencia alguna, dejándome hallar mi contento a tus expensas; pero nada perderás en ello." "Está siempre pronta y dispuesta a recibirme, porque quiero en adelante hacer en ti mi morada, para conversar y entretenerme contigo." "Sabes que soy un Maestro santo, y enseño la santidad. Soy puro y no puedo sufrir la más pequeña mancha. Por lo tanto, es preciso que andes en mi presencia con simplicidad de corazón e intención pura. Pues no puedo sufrir el menor desvío, y te daré a conocer que si el exceso de mi amor me ha movido a ser tu Maestro para enseñarte y formarte en mi manera y según mis designios, no puedo soportar las almas tibias y cobardes, y que, si soy manso para sufrir tus flaquezas, no seré menos severo y exacto en corregir tus infidelidades." "¿Por que te atormentas? Haz lo que está en tu poder, y Yo supliré lo demás que te falte. Pues nada pido tanto en este Sacramento, como un corazón contrito y humillado que con voluntad sincera de no desagradarme más, se acuse sin doblez. Entonces perdono sin tardanza, y se sigue de ahí una perfecta enmienda." "Mi amor reina en el padecimiento, triunfa en la humildad y goza en la unidad". Oración a Nuestro Señor en calidad de Rey en el Santísimo Sacramento. «Yo os adoro, ¡oh Jesús, Rey poderoso!, en este trono de amor y de misericordia. Recibidme por esclavo y siervo vuestro, y perdonad mis repugnancias y rebeldías al soberano dominio que tenéis sobre mi alma. ¡Ah Rey benigno! Acordáos que no podríais ser en efecto misericordioso si carecieseis de vasallos miserables. Alargad, os ruego, vuestra liberal mano y remediad mi extra indigencia con el precioso tesoro de vuestro santo amor, que al fin no es otra cosa sino Vos mismo; despojándome de todo este miserable amor propio y de todos estos pueriles humanos respetos que me tienen como asido y encadenado. Venid, ¡Soberano Rey mío!, a romper mis ataduras y a librarme de esta mala servidumbre y a establecer vuestro imperio en mi corazón. Quiero reinar en el vuestro por una ardiente caridad con mi prójimo, no hablando de él sino caritativamente, sufriéndole, excusándole, haciendo y queriendo para él lo que yo quisiera hiciesen conmigo, no permitiendo que mi lengua suelte palabra alguna ofensiva o de resentimiento. Así no habrá cosa que me turbe para que mi Rey halle en mí imperio de paz. Amén».
Santa Matilde "Sólo Yo comprendo perfectamente cómo me inmolo todos los días sobre el altar por la salvación de los fieles, lo que no pueden comprender absolutamente ni los querubines ni ninguna potencia celestial."
Santa Micaela del Santísimo Sacramento "Los santos no nacieron santos; llegaron a la santidad después de una larga continuidad de vencimientos propio."
San Maximiliano Kolbe "Tenemos que ganar el mundo entero y cada alma, ahora y en el futuro hasta el final de los tiempos, para la Inmaculada y a través de ella, para el Corazón Eucarístico de Jesús". P San Pedro Canisio "Me parecía que contemplaba el corazón de vuestro cuerpo sagrado con mis propios ojos, como si me lo abrierais y me dijerais que bebiera de él como una fuente , invitándome a saciarme de las aguas de la salvación en estos manantiales vuestros. Me invadieron ansias de que las aguas de la fe, esperanza y caridad fluyeran de vuestro corazón al mío."
San Pedro Fabro "Bebe la preciosa sangre y agua que brotan del costado del Señor y sana tu alma con Longinos. Pero no esperes mayores signos de su bondad divina aparte de su humanidad doliente, pues después de todo esto Cristo resucitó de entre los muertos y ya no sufrirá más."
San Policarpo "Por tanto, perseveren en su conducta y sigan el ejemplo del Señor, sin odiar a nadie y ayudándose mutuamente con la bondad del Señor". T Santa Teresa de los Andes "¡Oh démonos a El! ¿Qué son cincuenta años y aún cien de vida, comparados con la eternidad? Sacrificio aquí en el destierro, gloria sin fin en la patria. Y ¿qué es el sacrificio, qué es la cruz sino cielo cuando en ella está Jesucristo?" "Jesús mío, ahora he visto que todo lo del mundo es vanidad. Que solo una cosa es necesaria: amarte y servirte con fidelidad, parecerme o asemejarme en todo a Ti. En eso consistirá toda mi ambición." "¡Oh, soy feliz! Pues puedo decir con verdad, que el único amor de mi corazón ha sido El". "Jesús me pide que sea santa. Que haga con perfección mi deber. Que el deber es la cruz". "Mi espejo ha de ser María. Puesto que soy su hija, debo parecerme a Ella y así me pareceré a Jesús". "María, eres la Madre del Universo. Quién no se anima al verte tan tierna, tan compasiva, a descubrir sus íntimos tormentos? Si es pecador, tus caricias lo enternecen. Si es tu fiel devoto, tu presencia solamente enciende la llama viva del amor divino". "Donde me llevan soy feliz... Vivir siempre muy alegres. Dios es alegría infinita". "La voluntad de Dios es un alimento espiritual que fortifica el alma que se entrega a El gustosa". "Los corazones de los hombres aman un día y al otro son indiferentes. Solo Dios no cambia". "He visto que la felicidad en el mundo no existe. Siempre su trato me deja un vacío que lo llena por completo Nuestro Señor". "Por Jesús he preferido ser pobre y trabajar. Ya que El por mi amor se hizo pobre, yo por amor a El quiero serlo". "¡Que cosa más rica es para el alma que ama pasar la vida junto al Sagrario! Después que comulgo me siento en el cielo, y dominada por el amor infinito de Dios". "Jesucristo, ese loco de amor, me ha vuelto loca. Es martirio el que padezco al ver que corazones agradecidos a las criaturas no lo sean con aquel que lo sustenta, que les da la vida y los sostiene; que les da y ha dado todo, hasta darse el mismo". "Ocupémonos del prójimo, de servirle, aunque nos cueste repugnancia. De esta manera conseguiremos que el trono de nuestro corazón sea ocupado por su Dueño, por Dios". "Dios en cada momento me sostiene. Todo cuanto veo me habla de su poderío infinito y de su amor. Uniéndome a su Ser divino me santifico, me perfecciono, me divinizo". "El alma unida a Dios se diviniza de tal manera que llega a pensar, a desear y obrar conforme a Jesucristo". "¿Hay algo más grande que Dios? ¿Hay algo más grande que un alma divinizada? ¿No es ésta la mayor grandeza a que puede aspirar el hombre?" "Dios es amor y alegría y El nos la comunica. Solo Dios basta. Fuera de El no hay felicidad posible".
Santa Teresa de Calcuta >>
Santa Teresa de Jesús "...Procuremos siempre mirar las virtudes y cosas buenas que viéremos en los otros y tapar sus defectos con nuestros grandes pecados... tener a todos por mejores que nosotros..." "Tener gran confianza... Quiere su Majestad y es amigo de ánimas animosas, como vayan con humildad y ninguna confianza e sí." "Guíe su Majestad por donde quisiere. Ya no somos nuestros, sino suyos." "Un Santo triste es un triste Santo" "Tu deseo sea de ver a Dios; tu temor, si le has de perder; tu dolor, que no le gozas, y tu gozo, de lo que te puede llevar allá, y vivirás con gran paz." "Nada te turbe, Nada te espante, Todo se pasa, Dios no se muda, La paciencia, Todo lo alcanza; Quien a Dios tiene Nada le falta: Solo Dios basta". "Dios no ha de forzar nuestra voluntad; toma lo que le damos; mas no se da a sí del todo hasta que nos damos del todo". "¡Oh hermosura que excedéis A todas las hermosuras! Sin herir dolor hacéis, Y sin dolor deshacéis, el amor de las criaturas. ¡Oh nudo que así juntáis Dos cosas tan desiguales! No sé por qué os desatáis, Pues atado fuerza dais A tener por bien los males. Juntáis quien no tiene ser Con el ser que no se acaba: Sin acabar acabáis, Sin tener que amar amáis Engrandecéis nuestra nada". "Quizás no sabemos qué es amar, y no me espantaré mucho; porque no está en el mayor gusto, sino en la mayor determinación de desear en todo a Dios y procurar en cuanto pudiéremos, no ofenderle". ""Parezcámonos en algo a nuestro Rey, que no tuvo casa, sino en le portal de Belén adonde nació y la cruz adonde murió". "En Cristo mi confianza, Y de El sólo mi asimiento, En sus cansancios mi aliento, Y en su imitación mi holganza. Aquí estriba mi firmeza, Aquí mi seguridad, La prueba de mi verdad, La muestra de mi firmeza". "Harta misericordia nos hace a todos los que quiere Su Majestad entendamos que es El, el que está en el Santísimo Sacramento. Mas que le vean descubiertamente y comunicar sus grandezas y dar de sus tesoros, no quiere sino a los que entiende que mucho desean, porque estos son sus verdaderos amigos". "No hay que menester alas para ir a buscar a Dios, sino ponerse en soledad y mirarle dentro de sí". "Quienes de veras aman a Dios, todo lo bueno aman, todo lo bueno favorecen, todo lo bueno lo dan, con los buenos se juntan siempre y los favorecen y defienden." "El amor de Dios no ha de ser fabricado en nuestra imaginación, sino probado por obras". "No le parece que ha de haber cosa imposible a quien ama". "Mire yo a mi Amado y mi Amado a mí; mire El por mis cosas y yo por las suyas". "Sólo amor es el que da valor a todas las cosas". "Siempre he visto en mi Dios harto mayores y más crecidas muestras de amor de lo que yo he sabido pedir ni desear". "¿Quien no temerá habiendo gastado parte de la vida en no amar a su Dios?" "¡Oh Señor y verdadero Dios mío! Quien no os conoce, no os ama". "Considero yo muchas veces, Cristo mío, cuán sabrosos y cuán deleitosos se muestran vuestros ojos a quien os ama, y Vos, Bien mío, queréis mirar con amor". "Use siempre hacer muchos actos de amor, porque encienden y enternecen el alma". "La perfección verdadera es amor de Dios y del prójimo". "Quien no amare al prójimo no os ama, Señor mío". "El amor de Dios es el árbol de la vida en medio del paraíso terrenal". "El amor de Dios se adquiere resolviéndonos a trabajar y a sufrir por Él". "La mejor manera de descubrir si tenemos el amor de Dios es ver si amamos a nuestro prójimo".
Santa Teresa de Lisieux "La santidad no consiste en tal o cual práctica, sino en una disposición del corazón (del alma) que nos hace humildes y pequeños en los brazos de Dios, conscientes de nuestra nonada y confiados hasta la audacia en la bondad del Padre." "Para mí la oración es un impulso del corazón, una sencilla mirada al cielo, un grito de agradecimiento y de amor en las penas como en las alegrías." "Con la práctica fiel de las virtudes más humildes y sencillas, has hecho Madre mía, visible a todos el camino recto del Cielo." "Pido a Jesús que me atraiga a las llamas de su amor, que me una tan estrechamente a sí, que sea Él quien viva y obre en mí". "Vuestro amor me previno desde la infancia, creció conmigo, y ahora es un abismo cuya profundidad me es imposible medir". "Me preguntas por un método para alcanzar la perfección. Yo conozco el amor _ y solo el amor". "El amor puede hacer todas las cosas". "Solo cuenta el amor y la obediencia".
Santo Tomás de Aquino "No hay lengua capaz de explicar las dulzuras de este Sacramento, pues en la Sagrada Comunión bebemos la dulzura en la propia fuente". "La Eucaristía produce una transformación progresiva en el cristiano. Es el Sol de las familias y de las Comunidades".
Males: "Siendo Dios el bien supremo, de ningún modo permitiría que hubiese en sus obras mal alguno si no fuese tan omnipotente y bueno que del mal sacase bien." "El amor produce en el hombre la perfecta alegría. En efecto, sólo disfruta de veras el que vive en caridad."
V San Vicente de Paul "La caridad es el centro que une a la comunidad con Dios y a todos sus miembros entre si; contribuye a la unión de los corazones y los vincula indisolublemente a Dios". "Una buena forma de ejercitarnos en el amor a Cristo es manteniéndolo presente en nuestras mentes siempre que sea posible".
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