Un nuevo Pentecostés
Madre Adela Galindo, SCTJM
Fundadora
Solo
para uso privado -©
(Enseñanza impartida en 1998)
Estamos en la fase de preparación para el Jubileo del año 2000. )Porque
debemos prepararnos?
Porque todas las manifestaciones de Dios y los eventos de gracia
requieren una adecuada preparación. Por la era tecnológica, donde se
aprieta un botón y se consigue lo que queremos, tenemos la tendencia a
creer que todo, incluso lo espiritual, sucede automáticamente. El año
2000 va a llegar, pero para que no sea un año mas del calendario, si no
que sea un año de gracia, y un verdadero jubileo de liberación, de
conversión.... donde veamos a la humanidad acercarse de nuevo al Señor,
enderezar su camino y abrir las puertas al Redentor, debemos
prepararnos.
Que es prepararse? Es tener y poner en su lugar todos los elementos
necesarios para que se de el fruto esperado y es también quitar todo
aquello que es un obstáculo para alcanzar ese fruto.
JPII: Espera que en este Jubileo:
1- la humanidad regrese a la fuente de la Redención: el Corazón de
Cristo. Que las gracias de la Redención se derramen sobre la Humanidad y
la humanidad las reciba con corazón abierto. Cuales son esas gracias? La
victoria sobre el mal, sobre el pecado y la muerte. Mas que nunca
necesitamos que triunfe el poder Redentor sobre nuestro mundo
contemporáneo, disipando todo el mal, el pecado y la muerte que
prevalecen en nuestras culturas contemporáneas.
2-Que la humanidad reconozca que Jesús es el Único Salvador, el mismo
ayer, hoy y siempre.
3-Que Jesús nazca en todos los corazones y reine en ellos.
Dentro de esta preparación tan necesaria el Santo Padre JPII ha
designado el año 1998, año del Espíritu Santo.
QUE DEBEMOS ESPERAR DE ESTE AÑO DEDICADO AL ES?
Un año en que si nos unimos en oración ante la Eucaristía, y con la
intercesión y mediación de la Stma. Virgen y bajo la guía de Pedro,
JPII, podría haber un derramamiento del ES, o sea un nuevo pentecostés.
Porque podemos estar seguros, que si todos vivimos todas las
condiciones necesarias habrá un pentecostés este año?
Porque el Señor le dijo a Pedro en Mt 16: 19 A A ti te daré las
llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la tierra quedara atado
en los cielos@, O sea, Pedro, JPII, ha proclamado para toda la Iglesia
el año del ES, año en que el Espíritu actualizara en nosotros las
gracias que se derramaron en los eventos que en la plenitud de los
tiempos solamente pudieron ser obra suya, y por ello, solo El puede
hacer surgir todo ese poder en cada momento histórico de la Iglesia. El
mismo poder que el ES manifestó en la Encarnación y en Pentecostés
pudría manifestarse en cada uno de nosotros, en toda la Iglesia y en
toda la humanidad en el año 1998.
AEl ES actualiza en la Iglesia de todos los tiempos y de todos los
lugares la única Revelación traída por Cristo a los hombres, haciendola
viva y eficaz en el corazón de cada uno@ (TMA,44)
Si vivimos todas las condiciones necesarias habrá un pentecostés, pues
para que la obra de Dios se manifieste debemos preparar el camino de
nuestros corazones.
CUALES SON LAS CONDICIONES o elementos claves para atraer el
derramamiento del ES:
Estos elementos nos los revela el Papa Juan XXIII, en su famosa oración
profética al invocar el C. Vaticano II: "Espíritu Divino, renueva tus
maravillas en esta nuestra era como si fuera un nuevo Pentecostés, y
concede que tu Iglesia, orando perseverantemente e insistentemente con
un solo corazón y mente junto con Maria, la Madre de Jesus, y guiados
por Pedro, promueva el reinado del Divino Salvador, el reino de amor,
verdad, unidad, justicia y de paz".
1-Estar en el Cenáculo
2-unidos en oración
3-junto a la Santísima Virgen
4-guiados por Pedro
Es muy simbólico que hoy, 31 de Dic, esperamos el Año del ES: en un
cenáculo, adorando la Eucaristía, todos unidos en oración, junto a la
Santísima Virgen pues a las 12 am (María, Madre de Dios), y todo este
evento se hizo en respuesta a la dirección de Pedro, JPII, que ha
dirigido a la Iglesia a pedir de manera particular en este año, la
unción del ES. Creo que el Señor en su plan maravilloso y su infinita
sabiduría, planeo este evento de fin de año para revelarnos practica y
visiblemente lo que debemos vivir durante este año de 1998 para
propiciar un nuevo pentecostés.
EL CENÁCULO:
Estar en el Cenáculo: el lugar donde el Señor instituyo la
Eucaristía y celebro la ultima cena con sus apóstoles, donde ellos
estaban unidos en oración junto a la Stma. Virgen María, y donde se
derramo el ES, y hubo un Pentecostés.
-Por su trascendencia espiritual, a este lugar se le ha llamado en la
tradición de la Iglesia, la primera Iglesia cristiana. Para ser
verdaderamente Iglesia, la Iglesia debe mantenerse fiel al misterio de
su Nacimiento, o sea que si la Iglesia salio del Cenáculo el día de
Pentecostés, nos dice JPII: no puede nunca dejarlo.
Espiritualmente, el acontecimiento de Pentecostés no pertenece solo al
pasado, sino que la Iglesia debe estar siempre en el cenáculo.
APermanecer en oración junto a María, adorando y recibiendo la
Eucaristía, y con Pedro, para ser fortalecidos con el poder de lo Alto y
salir a proclamar el Reino de Cristo@.
EN ORACIÓN:
El soplo del ES, en su forma mas sencilla, se hace sentir en la
oración. Solo si la oración, nos dice el Papa, esta difundida por toda
la tierra, es que de igual modo estará difundida en toda la tierra la
presencia y acción del ES. Nada, ni nadie puede impedir la oración del
corazón del ser humano. Ni la persecución, ni la prohibición, ni las
proclamaciones oficiales de carácter antirreligioso o incluso ateo. La
oración es siempre la voz del corazón, que clama, que busca, que se
comunica con el Señor. El ES es el don, que viene solo con la oración.
La Stma. Virgen estaba en oración cuando el ángel se le apareció y por
obra del ES, concibió en su seno virginal al Salvador. Los apóstoles
estaban orando junto con María cuando recibieron el ES. Gracias a la
oración de la Iglesia, nosotros recibimos el ES en el sacramento del
Bautismo y de la Confirmación.
Solo los que oran, se abren a la acción poderosa y santificante del ES.
Y en este año, nos dice el Papa en la carta TMA: profundizaremos en la
Persona del ES, su presencia, su poder y su acción santificadora en
todos los tiempos.
Características de la oración:
perseverante e insistente
O sea, oración que proviene de corazones que tienen fe. Fe para ver mas
allá de las realidades temporales, fe que transforma nuestra mentalidad
y razonamientos. FE que espera, con confianza, que llegue la hora de la
manifestación de Dios. La oración solo puede ser perseverante, cuando
hay confianza en el poder de Dios, confianza en su sabiduría y confianza
de que su tiempo es perfecto, y que todo sucede para el bien de los que
aman al Señor.
Oración insistente: Sin cesar.... No hay pentecostés, si no hay
un pueblo orante. Los apóstoles estaban en oración con la Maestra de
Oración, la Stma. Virgen. Porque es Maestra? Porque su oración, que
proviene de un corazón inmaculado, puro, totalmente entregado a Dios,
tuvo el poder de atraer sobre si y sobre la Iglesia el don del Espíritu.
Si el don mas grande que puede alcanzar la oración, es el don del ES,
entonces la oración de M. Santísima, es la oración perfecta, la oración
poderosa, la oración fructífera, y de Ella hay que aprender a orar. Por
eso Ella nos pide: Oren, oren, oren.... Porque no solo nos puede enseñar
a orar, sino que sabe el poder que tiene la oración. Y nos lo dice tres
veces, revelandonos así, que hay que orar en todo tiempo, sin cesar, y
hacer de nuestra vida, una oración. La vida se hace oración, cuando
tenemos diariamente un tiempo de oración y después todo lo que hacemos,
lo hacemos con espíritu de oración, que es estar abiertos a descubrir en
todos los acontecimientos de la vida diaria la voluntad de Dios, su
presencia, y su plan, y ser dóciles, como la Virgen al ES, a la escucha
de la Palabra, Palabra que debe hacerse carne, o sea, vida en nosotros.
Es por esto, que este año 1998, el Santo Padre, nos pide que
contemplemos e imitemos a la Santísima Virgen, sobre todo como la mujer
dócil a la voz del Espíritu, mujer del silencio que se dispone a
escuchar la Palabra, y mujer de esperanza, que cree plenamente en el
cumplimiento de las promesas de Dios.
Vivimos tiempos muy difíciles, tiempos que pueden sobrellevarse solo con
el poder del ES, es por eso que JPII nos dice, ANuestra difícil época
tiene especial necesidad de la oración@, porque nuestra época necesita
la proclamación del Reino, con valentía, sin temores, con unción. NO es
suficiente evangelizar, crear programas y empresas de propagación del
evangelio.. Es necesario que todo lo hagamos después que hemos escuchado
la voluntad del Señor en oración, y con la unción del ES, confiando no
en nuestro poder, sino en el poder del ES que es el único que puede
revelarnos a Cristo.
Solo en oración se inspiran las grandes empresas de Dios... y solo la
oración las sostienen.
JUNTO A LA SANTÍSIMA VIRGEN
No hay Pentecostés, sin la presencia de la Esposa del ES. La presencia
de María, irremediablemente atrae el derramamiento del ES en la Iglesia.
El Señor se prepara un nuevo pentecostés para el mundo. Es por ello que
ha estado enviando como nunca antes la presencia de María. Ella cuando
visita un corazón, una casa, o el mundo, nos esta atrayendo al Cenáculo
de la Iglesia, a la adoración Eucarística, a valorar y comprender la
misión que Ella ejerce en nuestra vida espiritual, nos llama a la
oración, al amor y la fidelidad al Papa: todo esto con el proposito de
prepararnos a recibir este nuevo pentecostés.
La Virgen Santísima, no solo nos prepara a recibir este nuevo
pentecostés y lo atrae con su presencia, sino que ademas, junto con el
ES, coopera activamente para atraer un nuevo advenimiento de Cristo a la
Iglesia y al mundo. El ultimo capitulo del Apocalipsis termina con una
suplica unida, del Espíritu y de la Esposa que dicen: Ven! (Apoc 22:17)
AEste periodo antes del Jubileo del 2000, debe vivirse como en la espera
de un nuevo adviento@.
Adviento de una nueva primavera de vida cristiana. Esto se dará si los
cristianos son dóciles a la acción del ES@ (JPII, TMA)
Si este periodo previo al Tercer Milenio debe caracterizarse como un
nuevo advenimiento espiritual, un resurgir espiritual de conversión y de
un reencuentro con la Persona de Cristo como Salvador y Redentor,
entonces necesitamos la acción conjunta del ES con Maria.
La union del ES y Maria, es union esposal, o sea, que siempre da vida.
Esta misión conjunta que se inicia desde que el ES la hizo su obra
maestra, haciendo su Concepción inmaculada, la hemos visto manifestarse
de una manera particular, desde el siglo pasado, pero mas claramente
desde que el Papa Juan XXIII, pidió un nuevo pentecostés para la
Iglesia. Hemos visto 2 grandes corrientes fluir por el interior de la
Iglesia:
1-al ES actuar de una manera soberana a través de lo que conocemos como
renovación carismática (aunque transciende);
2-al Espíritu revelar a su Esposa, la Virgen María, a través de lo que
conocemos como movimiento mariano (mucho por apariciones, resurgir
llamado a consagración, Luis de Montfort, 5 dogma, y Papas marianos
desde el siglo pasado culminando con JPII).
El ES con la cooperación de María Stma están preparando un nuevo
advenimiento de Cristo: un renacer espiritual de la humanidad en este
momento histórico. Cristo debe ser reconocido por todos como el Único
Señor y Salvador de la humanidad, el Único Camino, la Única Verdad y la
Única Vida. El debe nacer y reinar en todos los corazones.
Este nuevo Pentecostés tiene un solo proposito, como nos dice el Papa
Juan XXIII en su oración:
Apara promover el reinado del Divino Salvador, el reino de amor, verdad,
unidad, justicia y de paz".
Donde se manifestara este Reinado de Jesús? El Reino esta en el Corazón.
El proposito de el derramamiento del ES, es cambiar el corazón humano,
es purificarlo, transformarlo, darnos un corazón nuevo, un corazón como
el de Cristo.
Os rociaré con agua pura y quedaréis purificados; de todas vuestras
impurezas y de todas vuestras basuras os purificaré. Y os daré un
corazón nuevo, infundiré en vosotros un espíritu nuevo, quitaré de
vuestra carne el corazón de piedra y os daré un corazón de carne, para
que caminen según mis preceptos, observen mis normas y las pongan en
practica, y así sean mi pueblo y yo sea su Dios". (Ez 36:23 27)
En este pasaje de Ezequiel vemos profetizado el futuro derramamiento del
poder del Espíritu Santo. Es muy importante notar, que el efecto
principal que causaría esta unción del Espíritu, seria la transformación
del corazón del hombre, haciendo pasar de corazón de piedra, a corazón
de carne. Este bautismo en el Espíritu significa purificación, limpieza,
santificación, sanación, liberación del pecado. Por lo tanto, para que
haya un nuevo pentecostés, debe haber primero purificación, cruz. La
oración debe ser acompañada de penitencia. Poner a muerte todo aquello
que es obra de la carne: o sea, arrancar las piedras de nuestro corazón
hasta que llegue a ser un corazón noble, puro, amoroso, olvidado de si,
entregado...
La humanidad parece haber perdido su corazón, o como le llama su
santidad JPII, parece haber perdido su conciencia. Cuando el hombre
endurece su corazón, es incapaz de amar, de entregarse, de discernir
entre el bien y el mal, de sacrificarse, de pensar en el bien de los
demás. Ahí provienen las guerras, violencias, odios, inmoralidades,
idolatrías.
Esta obra de transformación del corazón, requiere necesariamente
desgarrar el corazón. .
"Volved a mi de toda corazón...desgarrad vuestro corazón y vuestros
vestidos" (Joel 2:12 13)
Para que el ES pueda hacer una obra nueva en nuestros corazones tendrá
que traspasarlos. Por eso es que el permite que su corazón sea
traspasado porque el llevo sobre su corazón los pecados de la humanidad.
Y nos estaba revelando que para darnos un corazón nuevo va a requerir
una gran cirugía de corazón, pues nuestros corazones están muy enfermos.
Nuestros corazones están desfigurados.... (Atan desfigurado que no tenia
apariencia humana).
El Reinado de Cristo, sera manifestado por el Reinado de su Corazón
Eucarístico, que sera un reino de amor, paz, unidad, verdad y de
justicia...
Reino de amor: solo el Espíritu Santo, purificando como el oro en
el fuego, podrá hacernos pasar del egoísmo tan prevalente de estos
tiempos, al amor que es capaz de entregar la vida, de perdonar a los
enemigos, de olvidarnos de nosotros mismos y de llegar a los mayores
sacrificios por el bien de los demás.
Reino de Paz: Solo el ES, puede darnos la paz, paz que el mundo
no da, ni siquiera la conoce. En este siglo tan marcado por la guerra,
la violencia, el odio, necesitamos adquirir la paz del Corazón de
Cristo. La Paz es fruto de la reconciliación con Dios y con los hombres.
Es fruto de corazones traspasados por el amor y la purificación. Esta
Paz que supera el temor, paz que no sucumbe ante las tribulaciones.
Reino de justicia: porque la justicia camina con la paz. Ambas
tienden al bien de todos los hombres, por eso exigen orden y verdad. La
justicia restaura, no destruye. Es atenta y vigilante para asegurar el
equilibrio entre derechos y deberes. Solo el ES puede hacer surgir el
servicio desinteresado a la humanidad. Solo el ES nos da conciencia de
la necesidad del otro, de la llamada radical de luchar contra toda
injusticia.
Reino de Unidad: dice el Santo Padre, que el mayor regalo que
podemos hacer a Cristo en el 2000, es darle una Iglesia y un mundo mas
unido. La unidad es don del ES, unidad que no se basa en acuerdos
humanos, aunque tienen su valor, la verdadera unidad, proviene de la
verdad... solo así es permanente. En la oración de invocación al ES,
dice que oremos con una sola mente y un solo corazón, o sea, en comunión
basada en la verdad. Verdad que Cristo nos ha revelado en su misma
Persona, con sus Palabras y que continua trasmitiendo a través del
Magisterio de la Iglesia, de la Cabeza que es Pedro, el Papa.
Solo el ES puede disipar los errores de nuestro tiempo y las falsas
ideologías que se presentan como verdaderas. La verdad que nos revela el
ES, triunfara sobre la mentira y el error. Solo la verdad trae autentica
liberación.
Conclusión:
La Stma. Virgen nos esta llamando al Cenáculo de la Iglesia, a ser
un pueblo eucarístico con un estilo de vida eucarístico, viviendo las
virtudes del Corazon de Cristo, buscando la conversión sincera de
nuestros corazones, a orar con el corazón e incesantemente. A tener una
vida sacramental, a ayunar, a rezar el Santo Rosario.... Ella nos
instruye en todo lo que nos prepara para el nuevo Pentecostés.
El Espíritu Santo, derramandose en la humanidad y con la cooperación
activa de la Stma. Virgen, traerá un nuevo advenimiento de Cristo, el
reinado del Corazon de Cristo en el corazón de los hombres. La humanidad
necesita un transplante de corazón, necesita adquirir un nuevo corazón,
necesita al ES que es el único que puede quitar de nosotros el corazón
de piedra y darnos un corazón de carne; y necesita a Maria, para que nos
forme, nos moldee a imagen del Corazon de Su Hijo.
"La Iglesia persevera en oración con María...unida a la Virgen Madre, se
dirige incesantemente como esposa a su divino esposo, como lo atestiguan
las palabras del apocalipsis: El Espíritu y la Esposa dicen al Senor
Jesus: Ven!.