MERCADEO DE “DERECHOS SEXUALES”
Por Elida Z. de Solórzano
Abril, 2001

Referencias de Doña Elida Solórzano y lista de sus artículos en Corazones.org


El Fondo de Población de las Naciones Unidas (conocido como FNUAP o UNFPA) y el feminismo de género del mundo están llevando acabo un mercadeo del concepto “derechos sexuales”. Continuamente se refieren a ellos en sus publicaciones y reuniones como algo aceptado en los foros de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

El feminismo radical ahora está reclamando al gobierno por no estar cumpliendo sus compromisos respecto a los tales “derechos sexuales” que dicen que se acordaron en las Conferencias de El Cairo y Beijing (Pekín) de la ONU. ¡Esto es falso! No ha habido ningún acuerdo sobre esta terminología en ninguna de las grandes Conferencias de la ONU, ni de sus revisiones quinquenales, ni en sus Convenciones. Nicaragua aceptó los “derechos reproductivos” en El Cairo porque pertenecen implícitamente a Pactos previamente ratificados pero les puso “reserva interpretativa” porque ya en El Cairo se averiguó que algunas agencias de la ONU estaban incluyendo la “interrupción del embarazo” (aborto) dentro de esa terminología. Pero los Estados Miembros de la ONU nunca han aceptado los tales “derechos sexuales”.

¿Por qué no se llegó a un consenso sobre esta terminología? Sencillamente porque nadie quería definir los tales “derechos sexuales”. ¿Cómo puede, entonces, un Estado dar protección legal a algo que no ha sido definido? Los promotores de los “derechos sexuales” quieren que esa terminología signifique que cada uno puede hacer lo que quiere con su sexualidad y que la ley lo proteja. Eso permitiría, entre otras cosas, por ejemplo, que a la persona que tiene relaciones sexuales con niños y hasta infantes (pederasta) se le dé la protección legal que requiere “su derecho” a expresar su sexualidad así .

Lamentablemente, hoy estamos siendo testigos de una interpretación nueva de lo que son “derechos humanos”, haciéndolos algo centrado en el individuo y sus preferencias en lugar de la igualdad de protección o “bien común”. Así mismo vemos la propagación por algunos de “el derecho a decidir”, grito de batalla eufemístico de los proabortistas que en realidad no solo significa un “derecho de matar” sino también el poder expresar todo tipo de tendencias sexuales que los nicaragüenses consideramos aberrantes.

Los “derechos sexuales” también significarían entre otros: reconocer “matrimonios” entre homosexuales, darle a las prostitutas y los prostitutas (según léxico socialista “trabajadores sexuales”) la categoría de profesionales al igual que cualquier otra profesión. Pero peor aún, se abriría la puerta para que los niños también puedan expresar cualquier tipo de actividad sexual de su preferencia

Ojo, pues, hermanos nicaragüenses, especialmente los padres y madres de familia porque en mayo-junio hay otra Conferencia de Naciones Unidas, muy delicada porque es la revisión de 10 años de la Cumbre de la Niñez y la Convención sobre los Derechos del Niño, asunto que toca de cerca la vida del niño en todas sus etapas y a la familia y sus derechos como institución natural fundamental de la sociedad y habitat natural del niño. ¿Por qué creen que en este momento se acentúa la labor de mercadeo de cierta terminología por el feminismo radical de género y algunas agencias de la ONU? Recordemos lo que dijo el Nuncio Embajador del Vaticano ante las Naciones Unidas en el Estadio Nacional el 25 de marzo, Día Nacional del Niño por Nacer: “Solo en la última década, las conferencias de las Naciones Unidas han revelado una situación en la cual derechos humanos básicos, incluyendo el derecho a la vida, están bajo asedio.” Se le está haciendo la guerra a la institución de la familia, se quiere diluir los derechos, deberes y responsabilidades de los padres, se quiere eliminar la soberanía de las naciones y la libertad religiosa entre otros.

No dejemos que se nos engañe con los tales “derechos sexuales” que suenan inofensivos porque todos nos imaginamos otra cosa. El mercadeo está diseñado para que nos acostumbremos a determinado producto y lo compremos. A fuerza de repetición...que aceptemos como normales los “ derechos sexuales” como algo normal.. Ya hemos visto que los tales, ocultan una multitud de aberraciones y no ha sido lenguaje consensuado en la ONU como quieren hacernos creer. ¡Que nos prueben lo contrario desde los Informes oficiales de las Conferencias. Hablemos con las pruebas en la mano.

siervas_logo_color.jpg (14049 bytes)
Regreso a la página principal
www.corazones.org
Esta página es obra de Las  Siervas de los Corazones Traspasados de Jesús y María
Copyright © 2001 SCTJM