LA CUMBRE NOS ENCONTRÓ DESPIERTOS
Por Elida Z. Solórzano
Septiembre 2002
Referencias de
Doña Elida Solórzano y lista de sus artículos
en Corazones.org
Desde hace más de 20 años, sirviendo a los países poderosos y sus
intereses, la Organización de Naciones Unidas (ONU),
a los países en desarrollo nos viene dando “atól con el dedo”. Pero
las cosas cambiaron en la Cumbre de Desarrollo de Sudáfrica.
Un buen ejemplo del engaño de la ONU ha sido el concepto de
“Desarrollo Sostenible” a la cual está amarrada toda la ayuda de los
grandes Bancos y de los Donantes. La ONU y las Instituciones de
Bretton Woods han jugado un papel decisivo en la definición de lo que
es Desarrollo Sostenible. El concepto descansa en una idea negativa
del impacto de la población sobre el desarrollo y el medio ambiente.
La solución se basa en un control de la población, en el
“empoderamiento” de la mujer (entiéndase: “ideología de género”) para
que se sienta oprimida en el matrimonio, se destruya la familia y
tenga la menor cantidad de hijos posibles. Y por supuesto, un control
férreo del medio ambiente. Con el Desarrollo Sostenible se busca un
paradigma que supuestamente nos llevaría a la erradicación de la
pobreza. Es una terminología que no muchos entendíamos. Sin embargo,
parece que los subdesarrollados hemos despertado y comprendido que
esto es altamente ideológico, que lo que necesitamos es desarrollo sin
apellido, porque de lo contrario los únicos beneficiados serán los
poderosos.
Los ecologistas, llamados los “verdes”, iban buscando su agenda, los
feministas, el famoso “empoderamiento” y los grupos como la IPPF,
Federación Internacional para la Planificación Familiar y el FNUAP,
Fondo de la ONU para Asuntos de Población...el control de la población
por medio de cifras engañosas. Todos se fueron vacíos.
Es más, el asunto de población ni siquiera aparece en esta Cumbre.
Esta vez, también, un presidente de América Latina, el Presidente
Pacheco de Costa Rica valientemente alzó su voz contra las presiones
de las feministas radicales personificadas en la Sra. Mary Robinson,
Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU. Según informó el
Diario “Al Día” publicado por “La Nación” de Costa Rica, el 4 de
septiembre, el Presidente Pacheco dijo que la Sra. Robinson “pretendía
que Costa Rica firmara una enmienda que creemos algunos sería un
portillo para el aborto”. Y después de haberse negado hacerlo el
mandatario, valientemente dijo: “Costa Rica por su propia
Constitución, es un país católico, yo soy católico y como médico he
jurado defender la vida por encima de todas las cosas y si eso podía
ser un portillo para legalizar el aborto, yo no podía estar de acuerdo
y Costa Rica no lo apoyaría”. ¡Que buen ejemplo el del Presidente
Pacheco!
“Salud sexual y reproductiva” que signfican aborto en el lenguaje
codificado de la ONU fue puesto dentro de un párrafo que se refiere a
los cuidos de salud básica y prevención de enfermedades, haciendo
imposible que esa frase se refiera al aborto. Al fin quedó lo sexual
en su contexto. Siempre nos cuestionábamos por qué la ONU insistía en
separar la salud sexual del resto de la salud de la persona. La
respuesta, desde luego, es que a los que han manejan la ONU les gusta
que lo sexual vaya separado del resto de la persona para que el sexo
sea un juguete. Ha sido siempre la Unión Europea, con Canadá y los
EE.UU. de Clinton los abanderados de este concepto. Pero los EE.UU. de
George W. Bush son otra cosa y de paso le han dado valor a otros
países que antes se veían atropellados por la aplanadora proaborto,
progay, antifamilia y antireligiosa.
También en esta Cumbre se dispuso que el cuidado de la salud seria
promovida “de acuerdo con las leyes del país, la cultura y los valores
religiosos”, lo cual nos protege de las presiones que nos hacen
sobretodo la socialista Unión Europea, para legalizar el aborto en
nuestros países.
Por último, gracias a Dios no se incluyó la Carta de la Tierra. Aunque
sí perdimos un concepto muy importante que hace 10 años constituyó el
primer principio de la “Declaración de Río”, que dice: “el ser humano
está en el centro de todo lo relativo al desarrollo sostenible”. Esta
omisión va en consonancia con el concepto de la Carta de la Tierra que
quiere igualar al ser humano a cualquier otra especie que habita el
Planeta. Pero los que entendemos no debemos quedarnos callados y
seguiremos denunciando la Carta de la Tierra que la ONU quiere
introducir en una futura Convención Sobre el Medio Ambiente. ¡Pero no
sucederá si seguimos despiertos!